Mujer alerta de explosivos durante vuelo mientras iba en ropa interior hacia la cabina

kik

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Inglaterra / 16.08.2022 08:22:00

Los usuarios de un vuelo de la compañía Jet2 tuvieron que soportar un estresante y despertador instante cuando una pasajera se quedó en ropa interior y trato de ingresar dos veces a la cabina de la aeronave mientras alertaba de explosivos, asustando incluso a quienes estaban en el avión minutos después de que iniciará el vuelo.

Según revelan medios como Independent, la situación ocurrió en un vuelo de Lánarca, Chipre, a Manchester, Inglaterra, donde un hombre, identificado como Phillip O'Brien, de 35 años, decidió frenar a la mujer cuando se le dificultó al personal del avión.

El pasajero, quien además viajaba con seis integrantes de su familia, incluyendo su esposa y tres hijos, afirmó que la mujer gritó para alertar sobre explosivos. "Todo era normal y luego, poco después del despegue, una mujer caminó por el pasillo desnuda y se tiró a la puerta de la cabina gritando 'Allahu akbar'", para avisar sobre explosivos, dijo el hombre a The Mirror.

Agregó que luego de que la mujer dijera esa frase, muchos pasajeros se asustaron. Incluso habría preguntado a los niños si estaban "listos para morir", además de que supuestamente dijo que sus padres eran integrantes del grupo Estado Islámico. Durante la segunda vez que ella intervino, el pasajero decidió accionar tras hablar con los encargados de la aeronave.

“Entonces, cuando la mujer volvió a la cabina, tomé el control, la llevé al suelo y en ese momento el piloto hizo un aterrizaje de emergencia en París”, dijo. Según los medios británicos, el hombre, que es propietario de una empresa de drenaje, tiene experiencia en temas de seguridad tras haber trabajado en eso cuando era adolescente.

Algunos pasajeros afirmaron que sus hijos sufrieron ataques de pánico y que la mujer incluso gritó en los primeros 10 a 15 minutos del vuelo, teniendo la extraña actitud por varias horas. La empresa Jet2 solamente reveló que el vuelo fue dirigido al aeropuerto Charles de Gaulle, de París, Francia, la madrugada del 9 de agosto, con la idea de que "se pudiera descargar a un pasajero perturbador" del avión.

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