Eduardo Salazar
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El pasado 20 de diciembre llego a tomar puntualmente el vuelo 253 de Aviacsa con destino a la ciudad de Mérida, claro no sin antes tener que pasar por la revisión forzosa de todas las maletas, algo que en verdad es molesto, al ver a la muy joven señorita que sobre la mesa abría las maletas y urgaba en la intimidad de los pasajeros me vino a la mente la pregunta; "¿y tendrá idéa de lo que busca?". Al pasar por el arco detector otro show pues como creo hasta por llevar amalgamas en las muelas suena todos éramos revisados, un señor de acento norteño muy enojado exclamaba "Si no somo criminales!" y así es el trato que los de seguridad privada dan al pasajero que lo único que quiere es subirse al avión y llegar a su destino y alejarse de la imbecilidad de estos elementos.
Puerta 1, horrorizado veo el aparato asignado a mi vuelo: XA-SIX, y pensé, "Bueno, para morir nacimos ¿no?" pero al abordar veo con sorpresa que el avión está mucho mejor de lo que me imaginaba estaba muy limpio y eso ya es ganancia. Y un individuo al que solo mencionaré como Hugo Gutiérrez me había estado fregando con que le bajara unas tarjetas de seguridad, apenas llego a mi lugar (15a) me dedico a satisfacer su encargo pero me encuentro con las peores tarjetas que he visto, en otros vuelos pues hay alguna tarjeta doblada o manchada, pero las de este avion están más que dobladas, arrugadas y rotas así que escojo las menos jodidas.
Salimos con solo 10 minutos de retraso, cruzamos la 05 izquierda e inmediatamente al llegar a la 05 derecha el avión acelera y comienza el despegue, un poco preocupante ver pasar la base de Mexicana y notar que el avión aún no levanta pero lo logró.
Viaje tranquilo hasta pasar los límites de Puebla y Veracruz, entramos a una zona de intensa nubosidad que durante unos 20 minutos provocó fuertes turbulencias.
Cuando el avión más se sacudía noto algo raro, veo a un lado del motor una especie de pestaña o broche levantado el cual al salir no lo estaba, parece el seguro de la tapa de los motores, ¿es esto normal o debería de haberme preocupado y que los pasajeros vivieran "momentos de angustia y terror"?, varias veces me ha tocado viajar en esa parte del avión y nunca antes había visto eso levantado.
Y llega el esperado anuncio de que nos preparáramos para el "servicio de cortesía", el año pasado hize un par de vuelos con Magnicharters donde el mentado servicio consistió en alimentos calientes y bastante buenos para ser comida de avión, claro no esperaba que Aviacsa alcanzara tal nivel, pero... ¡¡¡No me imaginaba esto!!! Un trinche vasito de Sprite y una bolsita de "Conchitas" algo así como los Fritos norteños :evil: Demasiado salados y muy duros. :x
En el viaje de regreso que fue en el XA-TWO, un poco más jodido por dentro, el "servicio de cortesía" fue exactamente igual, por cierto algo muy bueno en el aeropuerto de Mérida es que al documentar las maletas no las deja uno en el mostrador, las lleva uno a una gran máquina que escanéa el equipaje y evita el molesto trámite de que te tengan que abrir las maletas.
Al llegar el pasado domingo 7 al AICM las maletas tardaron casi media hora para llegar a la banda 4, en la cual otros 4 vuelos estaban recibiendo su equipaje al mismo tiempo... ¡qué desmadre! En la banda entre las maletas veíamos un zapato tenis, una botella de shampoo y un cable con eliminador de baterías al parecer de una laptop que daban vueltas y vueltas y la gente mirando esperando que su equipaje no haya tenido el mismo fin. Al salir de la sala de equipajes salimos tranquilamente, NADIE nos pidió la contraseña de las maletas... ¡maravillosa la seguridad del AICM!
Y eso fue todo, lo más destacado de estos vuelos con Aviacsa es que me hicieron extrañar a Magnicharters!!!!!!
Puerta 1, horrorizado veo el aparato asignado a mi vuelo: XA-SIX, y pensé, "Bueno, para morir nacimos ¿no?" pero al abordar veo con sorpresa que el avión está mucho mejor de lo que me imaginaba estaba muy limpio y eso ya es ganancia. Y un individuo al que solo mencionaré como Hugo Gutiérrez me había estado fregando con que le bajara unas tarjetas de seguridad, apenas llego a mi lugar (15a) me dedico a satisfacer su encargo pero me encuentro con las peores tarjetas que he visto, en otros vuelos pues hay alguna tarjeta doblada o manchada, pero las de este avion están más que dobladas, arrugadas y rotas así que escojo las menos jodidas.
Salimos con solo 10 minutos de retraso, cruzamos la 05 izquierda e inmediatamente al llegar a la 05 derecha el avión acelera y comienza el despegue, un poco preocupante ver pasar la base de Mexicana y notar que el avión aún no levanta pero lo logró.
Viaje tranquilo hasta pasar los límites de Puebla y Veracruz, entramos a una zona de intensa nubosidad que durante unos 20 minutos provocó fuertes turbulencias.
Cuando el avión más se sacudía noto algo raro, veo a un lado del motor una especie de pestaña o broche levantado el cual al salir no lo estaba, parece el seguro de la tapa de los motores, ¿es esto normal o debería de haberme preocupado y que los pasajeros vivieran "momentos de angustia y terror"?, varias veces me ha tocado viajar en esa parte del avión y nunca antes había visto eso levantado.
Y llega el esperado anuncio de que nos preparáramos para el "servicio de cortesía", el año pasado hize un par de vuelos con Magnicharters donde el mentado servicio consistió en alimentos calientes y bastante buenos para ser comida de avión, claro no esperaba que Aviacsa alcanzara tal nivel, pero... ¡¡¡No me imaginaba esto!!! Un trinche vasito de Sprite y una bolsita de "Conchitas" algo así como los Fritos norteños :evil: Demasiado salados y muy duros. :x
En el viaje de regreso que fue en el XA-TWO, un poco más jodido por dentro, el "servicio de cortesía" fue exactamente igual, por cierto algo muy bueno en el aeropuerto de Mérida es que al documentar las maletas no las deja uno en el mostrador, las lleva uno a una gran máquina que escanéa el equipaje y evita el molesto trámite de que te tengan que abrir las maletas.
Al llegar el pasado domingo 7 al AICM las maletas tardaron casi media hora para llegar a la banda 4, en la cual otros 4 vuelos estaban recibiendo su equipaje al mismo tiempo... ¡qué desmadre! En la banda entre las maletas veíamos un zapato tenis, una botella de shampoo y un cable con eliminador de baterías al parecer de una laptop que daban vueltas y vueltas y la gente mirando esperando que su equipaje no haya tenido el mismo fin. Al salir de la sala de equipajes salimos tranquilamente, NADIE nos pidió la contraseña de las maletas... ¡maravillosa la seguridad del AICM!
Y eso fue todo, lo más destacado de estos vuelos con Aviacsa es que me hicieron extrañar a Magnicharters!!!!!!