EU dará respaldo aéreo a tropas africanas en Malí, anuncia el Pentágono
Tombuctú fue escenario hoy de saqueos de decenas de negocios de comerciantes presuntamente "árabes" por parte de una muchedumbre local que los acusan de ser "terroristas" aliados de los grupos islamistas armados que ocuparon la ciudad
fuente: milenio.com
Foto: AFPUn hombre fuma dos cigarrillos para celebrar la toma de Ansongo, ciudad norteña al sur de Gao, tras la entrada de las tropas nigerinas que desplazaron a los islamistas
Foto: AFPUn soldado malí intenta dispersar a un grupo de saqueadores en las calles de Tombuctú
Washington, Bamako • Estados Unidos transportará en sus aviones a los soldados de los países africanos que intervienen en Malí, anunció hoy a la prensa el portavoz del Pentágono, George Little. "Respaldamos el esfuerzo internacional brindando apoyo aéreo a los países de la región, sobre todo desde Chad y Togo", dijo el portavoz, quien precisó que los vuelos no habían comenzado aún.
Togo se comprometió a despachar un contingente de 500 soldados para integrar la misión internacional que interviene en Mali, Misma, bajo la égida de la Comunidad de Estados de África del Oeste (Cedeao). Chad, que no forma parte de la Cedeao, prometió a su vez el envío de dos mil militares.
El despliegue de la fuerza africana se ha hecho esperar debido a problemas de financiamiento y de logística de los estados que integran la misión. El Pentágono ya ha efectuado 17 vuelos de aviones C-17 en respaldo a las tropas francesas que intervienen en Malí desde el 11 de enero, transportando "más de 391 toneladas de material y cerca de 500 pasajeros", desde Francia hacia Bamako, señaló Little.
Tras dos semanas de debates internos, Washington aceptó poner a disposición de los aparatos franceses tres aviones abastecedores KC-135, cuyo primer vuelo desde la base de Morón (en España) transfirió "alrededor de 15 toneladas de combustible a los aviones de combate franceses".
París decidió intervenir militarmente en Malí para "frenar a los grupos terroristas islámicos" que avanzaban desde sus bases del norte hacia el sur del país, según justificó el gobierno.
Mientras, una muchedumbre saqueó hoy en Tombuctú decenas de negocios de comerciantes presuntamente "árabes", a los que acusan de ser "terroristas" aliados de los grupos islamistas armados que ocuparon durante 10 meses esta ciudad del norte de Malí.
Al mismo tiempo, en Adís Abeba, una conferencia de apoyo a Malí anunció promesas de ayuda militar y humanitaria por un monto de 455 millones de dólares. También en Adís Abeba, el presidente interino de Malí, Dioncounda Traoré, declaró que esperaba poder convocar elecciones antes del próximo 31 de julio.
En Tombuctú, centenas de personas, visiblemente muy pobres, saquearon comercios que, según ellos, pertenecen a "árabes, argelinos y mauritanos" acusados de haber apoyado a los insurgentes islamistas. Tombuctú, ciudad mítica del África musulmana, fue tomada el lunes por las tropas francesas y malienses.
En algunos comercios se encontraron municiones y radios militares. Pero la mayoría de los saqueadores se dedicaba a apropiarse de televisores, antenas satelitales, muebles, vajilla y comida. La organización de defensa de los derechos humanos Human Rights Watch (HRW) había solicitado el lunes a las autoridades "proteger de las represalias a todos los malienses".
Tropas nigerinas y malienses entraron en la ciudad de Ansongo, norte de Malí, localidad situada a 80 km al sur de Gao. Ansongo estuvo durante varios meses bajo control del grupo armado islamista Movimiento por la Unidad y el Yihad en África del Oeste (Muyao).
En Adís Abeba, los países participantes en la conferencia sobre Malí se comprometieron a aportar 455.53 millones de dólares para financiar la fuerza militar africana y la ayuda humanitaria, informó un responsable de la Unión Africana. A esa suma hay que agregar el apoyo material militar en equipos y entrenamiento, agregó.
Gran Bretaña anunció que iba a aportar 240 instructores militares para capacitar al ejército maliense. "La situación exige una respuesta internacional rápida y eficaz pues existe un riesgo para Malí, la región, el continente y más allá", dijo por su parte Nkosazana Dlamini Zuma, presidenta de la comisión de la Unión Africana.
También en Adís Abeba, el jefe de Estado interino de Malí dijo estar decidido a "organizar cuanto antes, en cualquier caso, antes del 31 de julio de 2013, elecciones limpias, es decir transparentes y creíbles", ante los participantes en la conferencia.
La organización de elecciones y la liberación de las regiones ocupadas forman parte de las prerrogativas de las autoridades de transición establecidas después del golpe de Estado militar del 22 de marzo en Malí. Este golpe de Estado contra el presidente de entonces, Amadou Toumani Touré, precipitó la caída del norte del país en manos de grupos tuaregs e islamistas.
Después de la toma de Gao y Tombuctú, los principales jefes de los grupos islamistas armados se refugiaron en las montañas, alrededor de Kidal, en el extremo noreste de Malí, cerca de la frontera argelina, revelaron fuentes malienses.
Soldados franceses tomaron posición esta noche en el aeropuerto de Kidal, la tercera ciudad más grande en el norte de Malí, después de Gao y Tombuctú, dijeron a AFP fuentes concordantes.
"Un avión francés aterrizó en la pista del aeropuerto de Kidal. Han tomado posición en el campo de aviación", declaró un funcionario de la administración local, cuyo testimonio fue confirmado por notables tuareg de la región y una fuente de la seguridad regional.
Kidal estaría bajo control de los rebeldes tuareg del Movimiento Nacional para la Liberación de Azawad (MNLA) y disidentes del grupo islamista Ansa Dine (Defensores del Islam), que formaron el Movimiento Islámico de Azawad (MIA). Los tuareg del MNLA afirman que no quieren enfrentar al ejército francés ni a las fuerzas militares africanas, pero quieren impedir la "violencia del ejército maliense".
Existe el temor de que la reconquista del norte desemboque en actos de venganza contra los islamistas que cometieron numerosos crímenes en nombre de la aplicación rigurosa de la ley islámica (sharia). En las ciudades bajo su control, los islamistas procedieron a numerosas amputaciones, ejecuciones y lapidaciones. Además los islamistas destruyeron numerosos mausoleos de santos musulmanes.
El mismo temor sienten las comunidades tuareg y árabes, muy presentes en los grupos armados, lo que llevó a la Corte Penal Internacional a lanzar una advertencia al gobierno de Malí.
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http://www.milenio.com/cdb/doc/noticias2011/a66dc0016de9acaba07179bcbe4909ce