javier hernandez
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Hurtos, robos, narcomaletas, abusos de autoridad son algunos de los elementos que dan forma al rompecabezas del aeropuerto de Maiquetía, uno de los principales terminales aéreos del país. Solo durante la temporada de vacaciones escolares se movilizaron a través de esta dependencia un millón 658 mil viajeros, según el director de la institución, Luis Graterol. Panorama
A finales del mes de septiembre, las autoridades nacionales conocieron a través de sus homólogos franceses el ingreso de mil 382 kilos de cocaína al país europeo, a través de un vuelo internacional de Air France, procedente de Venezuela. Más de 30 personas, todas vinculadas con la actividad del aeropuerto, se encuentran bajo investigación.
“Sin embargo, este hecho no es el único que debe ser investigado y atacado por los responsables del terminal aéreo. Son constantes los robos de objetos personales de las maletas de los viajeros, las transacciones ilícitas de moneda internacional en los ascensores y atracos a mano armada, incluso, dentro de las propias instalaciones. Sin contar el “matraqueo” que sufren los viajeros por algunos miembros de la GNB”, denuncia un trabajador del lugar.
En el mes de octubre la taquilla de pago de la tasa aeroportuaria fue robada por un sujeto, a mano armada, cuyo cómplice lo esperaba en las puertas de embarque, en una motocicleta. Según empleados de esta dependencia esto originó que cambiaran de lugar la oficina, a uno más resguardado.
A finales del mes de septiembre, las autoridades nacionales conocieron a través de sus homólogos franceses el ingreso de mil 382 kilos de cocaína al país europeo, a través de un vuelo internacional de Air France, procedente de Venezuela. Más de 30 personas, todas vinculadas con la actividad del aeropuerto, se encuentran bajo investigación.
“Sin embargo, este hecho no es el único que debe ser investigado y atacado por los responsables del terminal aéreo. Son constantes los robos de objetos personales de las maletas de los viajeros, las transacciones ilícitas de moneda internacional en los ascensores y atracos a mano armada, incluso, dentro de las propias instalaciones. Sin contar el “matraqueo” que sufren los viajeros por algunos miembros de la GNB”, denuncia un trabajador del lugar.
En el mes de octubre la taquilla de pago de la tasa aeroportuaria fue robada por un sujeto, a mano armada, cuyo cómplice lo esperaba en las puertas de embarque, en una motocicleta. Según empleados de esta dependencia esto originó que cambiaran de lugar la oficina, a uno más resguardado.